Ojalá encuentren aquí un pedazo de Cuba, de su alma y de su gente... un poco de Matanzas, y un poco de mí

viernes, 2 de diciembre de 2016

Fidelista sin remedio



Soy fidelista. Lo soy, sin remedio, como tantos otros millones de cubanos. Fidelista hasta la médula.

Fidelista porque creo en Fidel, porque me sirven sus ideas, su ejemplo, su estatura. Porque me sirven su obra, su liderazgo y sus principios.Y también me sirven sus imperfecciones de hombre.

No soy Fidelista porque me lo inyectaron en sangre, aunque también sea por eso. Ni porque lo sean mis padres y mis abuelos. Soy Fidelista porque no puedo NO serlo.

Porque un revolucionario de estos tiempos y de todos los tiempos tiene necesariamente que ser Fidelista. Porque no hay en su tiempo alguien que haya podido resistirse a su influjo, para odiarlo o para amarlo.

Fidelista porque seguiría a Fidel hasta la muerte, no ciegamente sino con la certeza de que jamás ese hombre inmenso tomó una decisión que no fuera en bien de su pueblo o de la humanidad.

Fidelista, aun cuando Fidel se equivocaba. Fidelista. No fanática.

Fidelista no para repetir como un papagayo sus discursos, sino para interpretarlos, para sacar enseñanzas, para ponerlos en práctica.

Fidelista desde pequeña, porque me sirven sus sueños y sus palabras.Fidelista porque a él le debo en buena parte, en una parte enorme, como tantos millones de cubanos, la persona que soy.

Fidelista cuando trabajo, cuando hablo, cuando escribo y también cuando critico, cuando soy inconforme, cuando me planto, cuando me atravieso.

Fidelista, fidelista. Una fidelista agradecida.

Una fidelista que a partir de ahora será, si es posible, más fidelista.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Por favor... comentarios maduros, inteligentes y respetuosos...