Ojalá encuentren aquí un pedazo de Cuba, de su alma y de su gente... un poco de Matanzas, y un poco de mí

sábado, 22 de mayo de 2010

El tiempo de una madre que tiene Cinco hijos presos

  Con lágrimas en los ojos Mirta Rodríguez dice que lo único malo es que ella siente que se le acaba el tiempo, se le agotan las horas para luchar porque se haga justicia en el caso de su hijo, pero enseguida se pasa las manos por la cara y su rostro vuelve a tener la misma serenidad.

  La anciana madre de Antonio Guerrero, uno de los Cinco cubanos presos en Estados Unidos por luchar contra el terrorismo, confiesa que por eso no descansa un minuto en su batallar.


  “Algunos preguntan a veces ¿usted está bien?, yo la veo muy fuerte, usted se ve muy bien; y yo les digo, bueno yo no sé si me veo bien, porque yo me veo como yo soy, pero la fortaleza que ustedes me ven, es una fortaleza que nosotros debemos tener, porque, ¿qué sería de mí si mi vida fuera de llanto y tristeza?

  “Eso lo tengo, eso no se aparta de mí, pero tengo que pensar que mis hijos me necesitan porque yo no lucho por uno, yo lucho por cinco. Nuestra causa está unida tanto en lo familiar como en todo. Ellos no mandan una misiva, la mandan en nombre de Los Cinco.


  “Y yo pienso que ninguna madre que esté pasando por lo que yo estoy pasando hoy, y tenga esa fuerza de transmitir la necesidad que tenemos para poder lograr que nuestros hijos lleguen a la Patria, a la casa, a sus hijos, que se han perdido todo ese amor, todo ese cariño…, que ninguna madre en esta situación se rendiría.

  “Entonces hay que estar fuerte, hay que amarrar el equilibrio y participar, y demostrar que el momento, como me decía una amiga argentina, es de luchar, no de llorar. Y yo me baso en eso.


  Mirta Rodríguez va a cumplir 78 años, y no sabe cuánto le pueda quedar. Sabe que en la lucha de sentimientos que lleva adelante debe tener un buen control para aguantar.

  Cuenta que siempre termina llorando, pero nunca dice que no cuando la invitan a hablar del caso de Los Cinco. Su esperanza está en que esa lucha se multiplique, abra corazones, y que la batalla no pare mientras ellos no vuelvan.

2 comentarios:

  1. Qué triste lo que dice esa madre, y depsués los gusanillos le dan ala a cualquier madre de preso político, que en verdad muchas dejan mucho que desear. Yo he visto hablar a esa mujer, a Mirta, u¡y la admiro, como admiro a su hijo Tony que es muy telntoso.

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  2. Todos los que la hemos conocido la tenemos que admirar... es una heroína!!!

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